• Datos del propio SESNSP afirman que, con más de 159 mil homicidios dolosos, a falta de 15 meses para que concluya el Gobierno Federal, será el más violento del país.
• Son cifras que el PAN no celebra porque enlutan a México. Son números para hacer un llamado urgente a detener la ola de violencia y dejar la ceguera permanente en Palacio Nacional.
A casi cinco años del gobierno de morena, entrarán al último tramo de un sexenio fallido en materia de seguridad, el más violento en la historia de México; de acuerdo a los propios datos del INEGI concentrados en el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Así lo mencionó la presidenta del PAN en Querétaro, Leonor Mejía, quien afirmó que, a casi 5 años de este Gobierno Federal, se han roto todos los récords en violencia; con más de 159 mil homicidios dolosos a falta de 15 meses para que esta administración concluya.
“Junio fue el mes más violento de todo el 2023 con 2 mil 303 ciudadanos muertos de manera dolosa. Y de junio de 2022 a mayo de este año, el promedio de homicidios dolosos en México fue de 87.8 al día, una cifra que desde el púlpito de Palacio Nacional se normaliza todas las mañanas”.
Leonor Mejía señaló que Acción Nacional no celebra estos números porque enlutan a miles de familias. Más bien, hace un llamado urgente para detener esta ola de violencia que desafortunadamente ha permeado en gran parte del país.
“Son cifras que no celebramos en el PAN, son cifras que enlutan a México y donde lamentablemente se está perdiendo la capacidad de asombro porque cada que ocurren situaciones violentas en el país, existe una ceguera permanente en Palacio Nacional”.
En retrospectiva, afirmó que los números del actual sexenio rebasaron por mucho a los del gobierno anterior (2012-2018) que cerraron con 156 mil 66 homicidios dolosos.
Para finalizar, Mejía recalcó que la petición al gobierno de morena es que asuman su responsabilidad en este último año. Que dejen de repartir culpas al pasado -llevan ya casi 5 años en el poder- y demuestren, si es que la tuvieran, una estrategia integral para enfrentar la inseguridad y violencia en el país, “más allá de los abrazos a delincuentes y de pensar que con regaños de sus abuelitos van a corregir el rumbo”.