El Secretario de Planeación y Finanzas, Germán Giordano Bonilla, informó que la calificadora Standard & Poor´s confirmó la calificación crediticia del estado de Querétaro y cambió su perspectiva de negativa a estable por su desempeño presupuestal balanceado después del gasto de inversión y por su bajo nivel de deuda.
Con esta calificación, Querétaro se posiciona dentro de las tres entidades con la calificación más alta a nivel nacional, entre ellas Guanajuato y Aguascalientes.
De acuerdo a la calificadora, se revisó la perspectiva a estable de negativa, y confirma la calificación de largo plazo en escala nacional de ´mxAA´ del Estado.
Esta calificación se basa en los resultados fiscales positivos observados al cierre del 2012 y al primer semestre del 2013, los que han contribuido a estabilizar la posición de liquidez del Estado, señala en su informe.
De acuerdo a Standard & Poor´s, esta calificación continúa sustentada por su desempeño presupuestal balanceado después de gasto de inversión, un nivel de deuda bajo y prudentes prácticas de administración financiera.
La actual Administración Estatal, que encabeza el Gobernador del Estado, José Calzada Rovirosa, ha mantenido una política de deuda, que se caracteriza por la ausencia de créditos a corto plazo y a niveles de deuda a la baja.
Standard & Poor´s también destaca las acciones recaudatorias que se han llevado a cabo en la entidad y que han contribuido a su crecimiento por encima de 10 por ciento en 2012 y lo que va de 2013, así como los esfuerzos por contener el gasto operativo en los últimos 18 meses.
Aunado a esto, refiere la calificadora, Querétaro audita sus ejercicios fiscales, continúa trabajando para presentar la información financiera de acuerdo con los lineamientos de la armonización contable y mantiene prácticas adecuadas de transparencia a través de su portal de internet.
La calificadora Standard & Poor’s destaca que el principal reto de la administración financiera del Estado, continúa siendo el manejo de flujo de efectivo, a fin mantener una posición de liquidez adecuada al cierre de cada ejercicio fiscal.