Sólo el 5% de la población acude al médico para revisión de hemorroides.
Se recomienda cambiar de posición cada dos horas para evitar la inflamación de venas en zona anal.
Las hemorroides es una enfermedad derivada de la hinchazón de los tejidos varicosos en la región anal, mismas que son el resultado de la presión en el recto; la cual se puede presentar en mujeres durante el embarazo y en la población laboralmente activa.
La sintomatología de este padecimiento comienza con comezón, sangrado y dolor en la zona anal al defecar o permanecer sentado; sin embargo, sólo el cinco por ciento de la población acude al médico ante los primeros síntomas.
“Este padecimiento afecta principalmente en vida productiva, a hombres que se mantienen por mucho tiempo en una misma posición, como choferes o transportistas y a mujeres que están embarazadas por los cambios hormonales”, aseguró la doctora Mónica Romero Guzmán, médico familiar de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 13 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Querétaro.
De no atender la enfermedad hemorroidal con el tratamiento adecuado, pueden surgir complicaciones muy dolorosas para el paciente como: dolor, comezón o sangrado que puede provocar una fístula ―heridas profundas que llegan a tejidos―, misma que tardan en sanar.
Como medida preventiva se pide a la población evitar el estreñimiento, de esta manera no se inflamarán las venas, además evadir el uso de ropa ajustada a nivel de la cintura para que tenga mejor circulación esa zona venosa y tener buena alimentación, ya que el sobrepeso contribuye a que se incremente el tamaño de las hemorroides.
El Seguro Social informa a sus derechohabientes de este padecimiento en consulta, además recomienda tomar agua para mejor circulación de la sangre, cambiar de posición por lo menos cada dos horas para evitar la inflamación de venas, cuidar el peso, y lo principal, acudir al médico cuando aparezcan las primeras manifestaciones para evitar mayores complicaciones.