El Gobierno Municipal de San Juan del Río, que encabeza el Alcalde Memo Vega, a través de la Coordinación Municipal de Protección Civil, llevó a cabo la destrucción de 500 kilogramos de pirotécnica que fue decomisada en calles, mercados, tianguis, colonias y comunidades del municipio.
Al encabezar el evento, el Secretario de Gobierno, Fernando Ferrusca Ortiz, destacó que desde el inicio de su gestión, el Presidente Vega instruyó a que se negarán los permisos para venta de estos productos, debido a su peligrosidad: “Esta es una de las encomiendas que nos ha encargado el Alcalde Memo Vega para proteger a los ciudadanos”.
En este sentido, reconoció el trabajo en equipo con la intervención de los inspectores de la Secretaría de Finanzas; los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal; así como de personal de la Coordinación Municipal de Protección Civil, para que estos trabajos hayan resultado un éxito.
Mención especial hizo a la participación de la ciudadanía y a la confianza que han tenido en el Gobierno Municipal, para denunciar la venta o traslado de este tipo de artefactos: “las denuncias que realizó la ciudadanía nos permitieron incluso detener vehículos provenientes del Estado de México que venían a comercializar la pirotecnia. Estos esfuerzos se tradujeron en un decomiso que de casi el doble de kilos comparado con el año pasado y en que lográramos saldo blanco en la temporada”.
Por su parte, Fernando Zamorano Estrella, Coordinador General de Protección Civil Municipal, informó que el operativo de decomiso tuvo una duración de aproximadamente un mes, decomisando 500 kilos de productos pirotécnicos, algunos de ellos de los denominados de alto impacto, que se producen a base de dinamita, resultando altamente peligrosos para la población.
Asimismo, exhortó a la ciudadanía a seguir denunciando y a tener mucho cuidado con estos materiales. Posteriormente brindó una explicación técnica durante la demostración, que consistió en explotar algunos productos pirotécnicos utilizando una sandía, un pollo crudo y bote metálico de 20 litros, con la finalidad de dimensionar los alcances de lo que podrían dañar el cuerpo humano.