Con el objetivo de afianzar la identidad y sentido de pertenencia, con los símbolos que representan a los habitantes del Municipio de Tequisquiapan, el H. Ayuntamiento de este Pueblo Mágico, encabezado por el Presidente Municipal Antonio Mejía Lira, conmemoró el trigésimo aniversario del Escudo Oficial de este Municipio en sesión ordinaria de cabildo.

 

Teniendo como invitado de honor al Cronista de la Ciudad, Jesús Landaverde Chávez, se develó la placa conmemorativa de estos 30 años del Heráldico Municipal, donde el alcalde Toño Mejía, resaltó; “Los elementos contenidos en este escudo simbolizan la gran herencia histórica y las fuerzas que han dado sustento a nuestro municipio y el cual debe ser utilizado como identificación por las entidades de la administración pública municipal, todos los edificios, instalaciones, documentación, vehículos y uniformes del personal deben exhibirlo con total responsabilidad”.  Mejía Lira, recordó que hace treinta años teniendo también como marco una celebración de la Feria del Queso y el Vino fue dado a conocer y utilizado por primera vez el escudo oficial de Tequisquiapan.

 

Por su parte el cronista de este Pueblo Mágico, Jesús Landaverde Chávez, explicó y describió los símbolos que conforman la heráldica del municipio; “En la parte superior se encuentra el Sol, que simboliza la vida, el Cuerno de la Abundancia, tejido con vara de manera artesanal, significa el tipo de trabajo que realiza gran parte de las familias de artesanos del pueblo que representa el principal sustento, La Uva, desde hace ya muchos años se conservan hermosos viñedos gracias a las condiciones naturales de la tierra y el clima ideal para este cultivo, El Río es sin duda una fuente de vida, debido a la gran vegetación y unos grandes árboles que enmarcan el cauce, aparece un Puente de Cantera al fondo que simboliza la tradición y cultura de los tequisquiapenses y por último y no menos importante, La Parroquia de Santa María de la Asunción, es la herencia ancestral que nos dejaron los misioneros españoles en el siglo XVI, que representa la fuerza moral que sustenta la vida cotidiana de la mayoría dela gente del pueblo y que sigue vigente hasta nuestros días”. Lo explica de esta manera el Cronista de la Ciudad.

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Por ActivoQ