A partir de la aprobación de la Reforma Fiscal, se ha reportado un incremento de la inflación, la disminución de la competitividad empresarial, la fuga de consumidores hacia Estados Unidos, la disminución del poder adquisitivo, el desempleo y el aumento del contrabando de la Unión Americana hacia territorio nacional.
Desde un inicio, en el PAN nos opusimos a la homologación del IVA y hoy el tiempo nos ha dado la razón, millones de mexicanos que radican a lo largo de nuestra frontera han sufrido un aumento injusto del 45% en términos reales, que supera cualquier aumento salarial.
La tasa preferencial establecida en la zona fronteriza no es una medida de privilegio, resulta necesaria para permitir la competitividad, pues la tasa establecida del 16% coloca en serias desventajas comerciales a los habitantes de la región.
Durante los primeros cuatro meses de 2014, en diversas ciudades fronterizas la inflación marcó variaciones superiores a la media nacional que fue de 1.38% de acuerdo con INEGI. Así, Mexicali alcanzó una inflación de 5.41%, Tijuana 4.56%, La Paz 4.81% y Ciudad de Juárez 4.21%.
La COPARMEX señala que el incremento del 11 al 16% mermó el poder adquisitivo de los habitantes de la zona fronteriza. Según datos presentados por el INEGI el gasto en los hogares creció 8.2% anual, mientras que en el resto del país fue de 3.8%.
De acuerdo con cifras del Servicio de Administración Tributaria (SAT), las devoluciones del IVA durante el 2014 cayeron 9.5% en comparación con los recursos devueltos en el 2013, al pasar de 264 mil millones de pesos a 239 mil millones de pesos.
Estas medidas tributarias muestran el desconocimiento del Gobierno de la forma de vida y la realidad económica de la región fronteriza norte y sur.
El aumento del IVA en la frontera viola el principio constitucional de la competitividad, de equidad, de proporcionalidad y de integridad consagrados en la Carta de la Organización de los Estados Americanos, que México ha suscrito.
Debe quedar claro, la situación de los contribuyentes en la zona fronteriza, con respecto al resto del país, no es la misma. Por ello, es necesario establecer condiciones que permitan la competitividad de manera equitativa.
Si queremos ser competitivos, debemos restituir el 11% original del IVA en la zona fronteriza