Llama a exhortar al Congreso Federal para defender programas, acciones y acuerdos de concurrencia con los estados.
En riesgo el presupuesto indígena comunidades de origen no pueden ni deben quedar excluidas de los beneficios del desarrollo, señala.
El reciente anuncio sobre el recorte presupuestal para el año 2017, que determina hasta un 70 por ciento menos lo destinado a Programas de Desarrollo para Comunidades Étnicas y la desaparición de ocho programas, lo que va en detrimento de 33 millones de mexicanos que son parte de las comunidades y pueblos originarios, alertó la Diputada Local por el XV Distrito, Atalí Rangel Ortiz, quien llamó a exhortar al Congreso Federal para defender programas, acciones y acuerdos de concurrencia con los Estados.
Rangel Ortiz, comentó que es lamentable que se priorice el pago de intereses de deuda sobre programas de atención que son imprescindibles para el bienestar y desarrollo de la población, como son, –dijo—“salud, de infraestructura en pueblos y comunidades, de seguridad social y alimentaria, así como de educación, lo anterior deja desatendidos a los grupos más vulnerables de nuestra sociedad, como son: las mujeres, los que menos tienen y la población de comunidades originarias”.
Argumentó que a la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), se le reduce el presupuesto en un 51.21 por ciento, pues en el 2016, ejerció más de 11 mil millones; y para el 2017 está proyectada la asignación de solamente 5 mil millones 800 mil pesos. “No se está considerando que las comunidades y pueblos originarios dependen en gran medida de los programas sociales y productivos, y que son estos la base de su desarrollo económico. Por ello, no estamos en posición de permitir que se les desampare ni que se exponga su estabilidad”.
La legisladora serrana detalló que los 8 programas que desaparecen y que son fundamentales para la gente, son: de Estudios de Preinversión; de Diseño y Aplicación de la Política Educativa; de Financiamiento al Microempresario y a la Mujer Rural; de Fortalecimiento a la Educación y la Cultura Indígena; de Igualdad y Sustentabilidad Ambiental; de Infraestructura Económica de Carreteras Alimentadoras y Caminos Rurales; de Productividad Rural; y de Promover los Derechos Humanos de los Pueblos y las Comunidades Indígenas.
De igual manera, los proyectos que tienen una disminución en su presupuesto son 6, mismos que son la base de la economía de los pueblos originarios, y que son: Apoyos para el Desarrollo Forestal Sustentable en un 63.77%; Empleo Temporal, en un 50%; Infraestructura en un 56.61%; Infraestructura Indígena en un 70%; Infraestructura para la Modernización y Rehabilitación de Riego y Temporal Tecnificado en un 62.09%; y, Mejoramiento de la Producción y la Productividad Indígena en un 50%. Destacó que de las 12 dependencias gubernamentales que conforman el Presupuesto Transversal para Pueblos Indígenas, se detalla una reducción promedio del 12.86%.
“El que propone el ejecutivo federal es un recorte histórico que va en menoscabo de quienes más necesitan, por lo que, debemos conformar un frente para que se reconsideré y salvaguarde el presupuesto indígena; nuestras comunidades de origen no pueden ni deben quedar excluidas de los beneficios del desarrollo; no les podemos seguir negando lo que por derecho les pertenece”, mencionó.
La diputada Presidenta de la Comisión de Asuntos Indígenas en la LVIII Legislatura señaló que no se puede presupuestar sin responsabilidad, queriendo subsanar errores de ejecución de los últimos tres años en que ha incurrido el Gobierno Federal, “Es nuestro deber corresponder a la ciudadanía, de lo contario, innumerables familias quedarán en la indefensión, obras quedarán inconclusas y múltiples proyectos se desecharan en el olvido, es innegable que la política social no es negociable, ni es momento de dejar de lado el futuro de México”, finalizó.